La fuerza de repulsión de una IA omnipresente

Esta es la versión sin ajustar del artículo aparecido en La columna del otro del Diario de Almería. La IA que estará en todas partes Hace unos días leía un artículo de Thomas Friedman sobre el, desde su punto de vista, irremediable acercamiento entre Estados Unidos y China que la inteligencia artificial (IA) va a propiciar. Su tesis es que, dado que la IA va a terminar formando parte de una cantidad abrumadora de bienes y servicios, a las dos superpotencias que comandan esta revolución no les va a quedar más remedio que ponerse de acuerdo en unas reglas de funcionamiento comunes para que continúe el comercio de bienes entre los dos países. Prevé una especie de «coopetencia». La IA es gaseosa Más interesante que ese concepto de mix entre competencia y cooperación me parece la metáfora del gas para explicar el alcance potencial de la IA. Es muy gráfica. En las primeras fases de la humanidad la información se movía con los propios humanos, solo el contacto físico permitía trasmitir i...