El día de la sobrecapacidad de la Tierra este año llega con el inicio de las vacaciones

Mañana 1 de agosto será el día en el que según la Footprint Network alcanzaremos el día de la sobrecapacidad de la Tierra, o el día del déficit ecológico o el Overshoot Day de este 20024. El nombre, en realidad, es lo menos importante. Lo verdaderamente relevante es el concepto que hay detrás. Después de mañana, el planeta estará (en realidad, los humanos del planeta estaremos) viviendo de los «ahorros» generados a lo largo de toda la vida del planeta (desde antes de que hubiera humanos). Todos los recursos que la Tierra es capaz de generar en un año los habremos terminado de consumir mañana. Obviamente, este no es un cálculo exacto, pero nos sirve para darnos cuenta del enorme impacto que nuestra especie tiene sobre el planeta.

La primera vez que se calculó, en 1971, el día de la sobrecapacidad de la Tierra cayó en 25 de diciembre (curiosamente, el día de mi cumpleaños). Una década después, ya se había adelantado hasta el 20 de noviembre. En 2001 el día ya caía en verano, el 13 de septiembre, un mes que consumimos en apenas 6 años, de 1999 hasta 2004. Desde 2005, la fecha ha caído en agosto. Y este año, como ya he comentado, solo ha ido de un día para no haber entrado en julio. Poco a poco, la fecha se ha ido adelantando en el calendario. Uno puede pensar que no hay problema: es solo una fecha y punto. Pero, a medida que esa fecha se adelanta, pasamos una mayor parte del año consumiendo los «ahorros» generados a lo largo de toda la vida del planeta. Y estos ahorros, como los de cualquier familia, van mermando poco a poco y pueden llegar a desaparecer.

Quienes siguen esta bitácora desde hace tiempo ya saben que este es un tema que me preocupa y que, para ilustrar mejor el problema, suelo representar la evolución con una gráfica en la que se puede ver el porcentaje de cada año que pasamos viviendo de los «ahorros».

En el gráfico se pueden ver los efectos de las grandes crisis, en las que la fecha se retrasa –1979, 1983, 1992, 2009 o 2020–, y también se pueden observar las grandes tendencias. Las décadas de los 90 y 2000, por ejemplo, fueron especialmente veloces en el consumo de los recursos, coincidiendo con la transformación acelerada de China e India.

Pero también podemos comprobar como, desde finales de la pasada década, hemos logrado paralizar el proceso o, por lo menos, ralentizarlo de manera considerable. Los esfuerzos de las economías mundiales por desengancharse del consumo de recursos naturales, en su intento por ser más sostenibles y por combatir el calentamiento global, parece que están comenzando a dar algún resultado. Y estas son muy buenas noticias. Tanto como la llegada de las vacaciones para un gran número de españoles. Que las disfruten...

Fuente: elaboración propia